Mal menor. (2-2)

Se presentaba el Aibó en la víspera de SanJuan con el objetivo de finiquitar practicamente la calsificación y encarrilar el primer pueto de grupo. Además se presentaba con el equipo de gala. Sólo las bajas de Chuli y Solá se iban a producir. Así pues, el Aibó salió con Daviz en la portería, Rafa, Fininho y Ferrán en Defensa, Mingarro y Fonte al medio y Rafa Piñastri arriba.

Ya desde el primer minuto se vió que el Aibó no iba a estar cómodo en el campo, el óscar Sanchez presionaba muy arriba y no dejaba al Aibó salir con el juego canalizado desde atrás, quizás en estos primeros minutos fué donde el Aibó demotró más temple y paciencia para encontrar su juego cosa que se fue diluyendo durante el partido donde cada vez se buscaron más las individualidades y no se buscó el juego en equipo.

Aún así con el partido trabado una falta de entendimiento entre Hugo y el portero del Oscar Sánchez dejan en bandeja el gol a la Sargantana que consigue su primera picadura. Aún así, el peligro sobre todo lo creaban ellos Hasta que en un balón escorado Rafa no llegaba a tapar bien y un tiro cruzado que pillabva a contrapié a Daviz establecía el 1-1 al final de la primera parte.

La segunda parte empezaba peor si cabe y las individualidades se habían apoderado del equipo junto con la indignación de algunos jugadores con el árbitro que dicho sea de paso, estuvo machacón con muchas faltas pitadas en contra y pocas, muy pocas a favor, cosa que hizo que algunos jugadores rojuillos perdieran los papeles llegando incluso a ser amonestados casos de Manolo y Fininho. pero en un chispazo Gio vió muy bien el pase entre líneas a Fonte que define perfecto por bajo y establece el 2-1. la única vez que se buscó conbinar llegó el gol, pero ni así el Aibó cambió de estilo y siguió empecinado en balones largos a Fonte y jugadas individuales que acabaron en un balón perdido, un 3 para 2 y empate del partido. Un empate merecdio ya que minutos antes ya habían encontrado varias veces la línea de fondo por banda derecha donde Márquez no tuvo su día.

Aunque al final Fonte tuvo en sus botas el 3-2, casi el pitido final fue un alivio para el Aibó que no encontró su juego en ningún momento y sólo la suerte y la gran calidad individual de sus estrellas evitó la derrota en este envite.